No hay más, un escaparate que se abre al ojo mostrando todo el detalle del modelo y nada más.
En una vitrina nos muestran la esencia de esta diseñadora fantástica, en un escaparate que puede resultar arriesgado pero extremadamente sencillo visualmente para el expectador.
Se la juegan en un modelo, lo cual puede parecer fácil pero si no aciertas a la primera el escaparate pierde toda oportunidad de hacer su cometido. En este caso ganan, siempre exquisitos y detallistas, elegantes pero con un puntito irreverente que hace que nos paremos y soñemos con ese vestido que contiene el cóctel perfecto.
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